Las manualidades con materiales reciclados tienen el encanto del antes y el después, en este caso convertimos un simple envase de desodorante de esos que traen una bolita como aplicador en un objeto decorativo para la Navidad. Igualmente podemos hacer por el mismo método un mini juego de bolos, muñecos para decorar la habitación infantil, angelitos... Las posibilidades son muchas y el gasto mínimo.

Materiales
1 Envase de desodorante
Restos de tira bordada
Pistola de silicona
Pinturas al agua
Pinceles blandos
Aguja
Hilo

En primer lugar sacamos la bolita utilizando unas tijeras. Despegamos el rótulo y lavamos bien.
Fijamos la bola con silicona al cuerpo del monaguillo y dejamos secar.
Pintamos con pintura color carne toda la bola y cuando seque bien haremos el pelo con pintura marrón oscuro.
Para que los ojos salgan redondos he usado un palito de chupa-chups mojado en pintura marrón.

Mientras, planchar bien la tira bordada y pasarle un hilván para rizar, esto hará la baberola del monaguillo.
Pintar de rojo el cuerpo, si es necesario dar dos manos. Dejar secar muy bien para que podamos decorarlo sin riesgo de estropear la pintura.
Rizamos a la medida del cuello, apuntamos bien para que no se deshaga y lo ponemos alrededor del cuello del monaguillo fijándolo con una gota de silicona caliente.
Ponemos otro trozo de tira bordada en el borde del vestido que fijamos a su vez con silicona.
Con la bolita de un alfiler de cabeza negra pintamos los botones y dejamos secar.

Nuestro monaguillo está listo.